En la actualidad las compañías modernas están apostándole al desarrollo de tecnologías alternativas que contribuyan con el desarrollo de las diferentes líneas de negocio y del objetivo misional que plantean los empresarios modernos.
El desarrollo de software, aplicaciones y sistemas integrales en pro del progreso se han transformado hoy en día en uno de los propósitos misionales de las grandes industrias y corporaciones, por eso en cada vez más corporaciones se están implementando equipos de innovación y desarrollo (I+D) que contribuyan con la implementación de soluciones a la medida.
Así pues, las nuevas tecnologías se han convertido quizás en elemento más importante de evolución y en la herramienta mas importante para estar a la vanguardia y no perder vigencia en el mercado actual que es bien competitivo. Diversificación empresarial, el rumbo del crecimiento
La diversificación empresarial es hoy una de las estrategias de crecimiento más utilizada por las compañías para ampliar su campo de acción. Es sinónima de expansión, crecimiento, apertura e inversión. Es un camino que se emprende cuando los nichos de mercado o nuevas líneas de negocio ofrecen atractivas oportunidades.
Pese a que el riesgo de la diversificación empresarial es mayor al de otras maniobras de crecimiento, sus resultados, más allá de los económicos, si es bien ejecutada, reducen en gran medida la incertidumbre frente al futuro. Dentro de los alcances que se obtiene con ella están la posibilidad de no depender de un solo grupo de clientes, que en caso de reducirse o cambiar de proveedor generarían un problema de supervivencia. Asimismo el dominio de varias tecnologías, factor importante porque es un área de conocimiento bastante cambiante. Y finalmente, la viabilidad de apoyarse en dominios propios para extender la compañía con altas probabilidades de éxito.
Una empresa que elija esta estrategia como modelo puede optar por dos opciones para su crecimiento, la diversificación empresarial relacionada y la no relacionada.
La primera es aquella que busca combinar dos o más actividades que guarden relación o posean algún tipo de compatibilidad tecnológica, comercial o productiva. Lo importante es que ambos negocios den mejores rendimientos juntos que por separado. Una muestra clara sería el caso de una empresa de soluciones tecnológicas que desarrolle soluciones para una firma de transportes especiales.
La no relacionada, como lo indica su nombre, se refiere a compañías que se decidan por mercados o líneas completamente nuevas a su razón social y que no guarden relación con los productos o servicios que han ofrecido. Puede que se trate de la vía más arriesgada, pero sin duda es la que han elegido los grupos empresariales más reconocidos del mundo. Un ejemplo aquí sería que una misma organización sea propietaria de una empresa de servicios BPO y de un CDA.
Cualquier acción que realice una compañía en pro de su crecimiento es bienvenida ya que los sectores en los que incursione se beneficiarán de servicios integrados y en completa sinergia; adicionalmente sus empleados podrán sentirse orgullosos de pertenecer a una organización en constante progreso.